Alberto y la infodemia


El manejo de la comunicación presidencial frente a la crisis del Covid-19 fue un factor clave tanto para corregir conductas sociales como para la reconstrucción del poder presidencial.
El presidente Alberto Fernández había dicho muchas veces, de una u otra manera, que había que esperar hasta marzo para comenzar su gestión. Se refería, más bien, a que debía resolver la difícil cuestión de la deuda externa. Nadie se había imaginado que en marzo lo estaba esperando una crisis mucho más difícil que la renegociación con el FMI y los acreedores externos.
La epidemia de esta nueva cepa del coronavirus comenzó en China casi simultáneamente con el período presidencial. Cuando se hizo pandemia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió los riesgos de la infodemia, que refiere a la sobrebundancia de información imprecisa, incorrecta o maliciosa.
La reacción presidencial fue muy acertada y su comunicación tuvo que navegar con un mundo comunicacional muy distinto al que conocía desde su paso por el gobierno, a principios de este siglo.
"Los medios siguen cumpliendo un rol importantísimo, pero no es el eje rector", dijo el politólogo y director de la maestría de Comunicación Política de la Universidad Austral, Mario Riorda, en una más que recomendable entrevista realizada por Omar Baez en RRPP RADIO.
Ciertamente el manejo del miedo, que es un elemento significativo a la hora de modificar las conductas sociales, puede ir apoyado en la amenaza o en el apercibimiento. Pero el arte es hacerlo con el tono justo y la palabra precisa, o en forma equitativa con los diversos sectores.
El mensaje del domingo, en el que Alberto se ensañó con los empresarios que despiden gente y que se aprovechan de la crisis para sacar ventaja, derivó en un cacerolazo a las 24 horas. Fue algo extraño: terminados los aplausos a los médicos y el personal del cuidado, vinieron los cacerolazos contra los políticos.
En las crisis sucede de esa forma, como cantaba Gustavo Cordera en "La Argentinidad...": "del éxtasis a la agonía...". Hoy, muchos políticos anunciaban reducciones salariales.+)

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